miércoles, 17 de noviembre de 2010

El diccionario

A
Agasajar (verbo): Acto de besar con pasión a otra persona (Le puso una agasajada)

Aperingar (verbo): Agarrar algo, asirlo con fuerza (aperíngalo bien). Usase también para referirse cuando se toma con fuerza a otra persona y se le besa (Se aperingó una morra).

Arre: Derivado de la arenga, (interjección) que se usa para estimular a las bestias, pero que en el habla coloquial mexicalense, expresa emoción o deseo de emprender una acción. Ejemplo: ¿Vamos a comer?, -'¡Arre!', 'Arre Lulú'. También se utiliza para presionar o motivar a otro: "Arre con la barre"

Usado para confirmar la recepción de un mensaje, cerrar un trato, o confirmación de la asistencia a un evento.

B
Balín (Posiblemente derivado de balín, bala de menor calibre): Despectivo, usase para minimizar la calidad de algo o alguien. (Está bien balín).

Barrio: Colonia, zona de residencia; usado por extensión, para referirse y saludar al residente de la colonia: '¡Qué onda barrio!'

Bizcocho: Torpe, ñoño. ‘Cállate, estás bien bizcocho’.

Boli: Agua de sabor, congelada en bolsas cilíndricas de plástico, con un diámetro promedio de 3 centímetros, y un largo de 15 centímetros.

Brawley (Poblado del Valle Imperial, USA): "Está pa'l lado de Brawley". Refleja la estética o la escasa funcionalidad de algún objeto, persona o suceso; que se encuentra dañado o en mal estado, adaptación local de que algo está pa'l lado de la chingada.

2 Distancia geográfica; que está lejos.

Bubba: Embutido gigante, wini, popularizada por el beisbolista de los Águilas de Mexicali, Charles Lee 'Bubba' Smith.

Buchón: Hombre que copia la forma de actuar (escucha música norteña, bebe whiskey 'Buchanan's') y de vestir (lentes y ropa extravagente, imitación de diseñadores europeos), de narcotraficantes sinaloenses (aunque aparentemente, sin delinquir).

C
Cácaro: Aunque originalmente refiere al operador del equipo de proyección en un cine; la voz cácaro, se convirtió en una especie de insulto. ‘Buuu, cácaro’.

Cachi (Posiblemente derivado de cacho, trozo): Usase al momento de pedir algo, sobre todo comida o bebida, !Cachi!. También para anunciar que no se está dispuesto a compartir, !No cachi!.

Cachora: Reptil de la familia de los lagartos. 'La Cachora', variante en la que algunos residentes le dicen al centro comercial 'Plaza La Cachanilla'.

Caguama: Cerveza envasada en botella de 1 litro.

Caica: Variante de canica.

Cajueludo: Cobarde. Aquel a quien 'se le abre la cajuela'.

Calote: Persona musculosa. 'El bato está bien calote'.

Camarada.- Aunque en la localidad, se utiliza este término en el mismo sentido que lo marca el diccionario de la RAE: un sinónimo de amigo, o como correligionario en una organización política, también tiene otra connotación, ésta, con una carga despectiva y diametralmente opuesta al sentido original, aunque en ocasiones se utiliza tambien para ser indiferente con alguien: 'Ese camarada, se pasó de lanza', 'Acuérdate del camarada ese, que vimos el otro dia'.

Camote: Amante homosexual masculino. 'Es su camote'.

Carapila (Derivado de la marca Caterpillar): Vehículo motoconformador, utilizado en la construcción.

Carposo: Llamativo. ‘Muy carposa la ropa del bato’.

Carrilla: Sorna, burla, cuya condición principal es la insistencia y constancia con que se castiga a otra persona. 'Le están dando mucha carrilla'. Excesiva carga de trabajo. 'Mucha carrilla en la escuela'.

Catiza: Ir deprisa. ‘El carro paso en catiza’.

Clavar, Clavado (de clavo): En un pleito, salir triunfador. ‘Me lo clavé’. Sostener relaciones sexo-coitales. ‘Se está clavando a la morra’. Obsesivo, prendado. ‘Es bien clavado en la escuela’, ‘La morra está bien clavada con el bato’. Robar. ‘Me clavé un gansito de la tienda’.

Clemar (Derivado de claim): Reclamo, reclamar. Palabra de uso común en la década de los 30 del siglo pasado.

Clica: Pandilla, grupo de personas afines por alguna actividad, por lugar de residencia. ‘El bato es de la clica’.

Cora (de quarter, moneda norteamericana de 25 centavos. La cuarta parte de un dólar): Préstame una cora.

Curada (variante cura): Divertido. ‘Qué curada estuvo la película’. Agradable a la vista, a la moda. ‘Esta curada la ropa’.

CH
Chabela (Copa con capacidad de 630 mililitros, derivado al parecer, de ‘Chabela Shooner’): Bebida preparada con cerveza y una mezcla de jugo de tomate y almeja.

Chaca: Experto

Chamizo (salsola kali): Planta de la familia de las amarantáceas, que habita terrenos arenosos de todo el mundo. La peculiaridad es que para continuar con el ciclo reproductivo, la planta, al secarse queda convertida en una esfera de ramas, que gira debido a la fuerza del viento, y de esa forma distribuye las semillas.
Chavala (De Chavo, a su vez de chavala, mujer): Negarse a ayudar a alguien, teniendo posibilidad de hacerlo. ‘Me dejaste solo. Qué chavala’.

Chancla: Mujer homosexual. 'Esa vieja es chancla'.

Chapulín (Derivado del ingles shower): Pegarse un chapulín, darse un shower, bañarse.

Chicali: Forma en que los integrantes del movimiento 'Low Rider' (Cholos), bautizaron a Mexicali. 'Chicali rifa 13'. Personaje de una historieta, creado por el mexicalense Manuel Alberto León Lugo, conocido como 'El León', o 'El Lyon'. El Chicali (el personaje de la historieta), es un cachanilla casado con Wisteria Tiyei, y es padre de dos hijos: El Patuli, y El Macurto.

Chicalense: Gentilicio alternativo de los nacidos en Mexicali. El oficial es 'mexicalense', el más popular, es 'cachanilla', este ultimo, derivado de una planta endémica.

Chilo (Derivado de chido, usado en el centro de México): Bonito, agradable. ¡Qué chila está la tarde!

Chinesquear (verbo, derivado de chinesco, chinesca, adjetivo que denota aquello es chino): Recorrer la zona de La Chinesca, para conocer su historia; ir de paseo.

Cholo: La Real Academia Española, dice que se trata de un indio que adopta usos y costumbres occidentales. Un cholo es el representante del movimiento 'Low Rider', relacionado con 'Pachuco'.

Chuky (Derivado del personaje de la película ‘Child's Play’, o en México 'Chucky el muñeco diabólico'): Recién exhibida la película, se usaba como sinónimo de fealdad, 'la morra está bien chuky'. Evolucionó hasta convertirse en lo opuesto, en otra forma de denominar la belleza. 'Mira esa morra, está bien chuky'. Variante: Chukysnais o Chukysnice.

Churros Lokos: Frituras de maíz en forma cilíndrica y estriada, preparadas con chile, limón, clamato, cueritos de cerdo, cacahuate japonés, pepino.

D
Disca: Plato cóncavo, de metal, de aproximadamente un metro y medio de circunferencia, que forma parte de maquinas trilladoras, pero que se ha adaptado como una especie de enorme plato para freir comida, en especial, pollo y pescado.

E
Estrilar: Fanfarronear.

Engranarse (Del francés engrener, engranar, engrane, enlazar): Muy dedicado, que se fija en los detalles. ‘Se engrana mucho en la maroma del piojo’. Que se fija en minucias. También aplica como sinónimo de ‘clavado’. ‘Está bien engranado con el bato’.


F
Fany o Fánix (Del ingles funny, derivado de fun, divertido): Vocablo con el que se le nombraban a las revistas de historietas de origen estadunidense, como 'Archie', 'Bugs Bunny', 'El Super Ratón'.

Fil (Derivado de field): Campo agrícola, en este caso, del valle Imperial, en donde algunos mexicalenses trabajan, con o sin autorización legal, de parte del gobierno de los Estados Unidos. ‘¿Dónde trabajas?, en el fil’.

G
Ganso: Ventajoso. ‘Te ganseaste la ultima cerveza’.

Gota: Gasolina. ‘No tengo dinero para la gota’.

Gotera: Gasolinera.

J
Jambar: Robar. Jambo, ladrón.

Jiñoso: Sucio; de mala calidad. ‘Mira como trae toda jiñosa la camisa’.

K
Keki (vocablo en desuso, derivado del inglés 'cake', que se pronuncia keik): Pastel. En una fiesta de cumpleaños, '¿A qué hora partimos el keki?

Kin (de origen incierto): Solicitar autorización para dejar de hacer algo y no ser castigado. En un juego infantil: ‘Pido kin’.

L
Lacra: Tacaño, ahorrativo y desconsiderado con sus amistades. ‘¿Solo pusiste 10 pesos?, qué lacra te viste’.

Lanza: Abusivo. ‘Le cobraste mucho dinero, te pasaste de lanza’.

Lázaro: No dejar descansar a alguien. ‘Me trae lázaro con el trabajo’.

M
Macuarro: Albañil, desaseado. ‘Mira cómo andas, pareces macuarro’.

Manguera: Exagerado

Machaca: Carne de res deshebrada, cocinada con tomate, cebolla y chile. En Sonora, la machaca, es carne de res seca y luego deshebrada. Otra forma de decir que las cosas están listas: ‘Ya se hizo la machaca’.

Milonga (género musical, similar al tango): Perdición, tirarse al abandono. ‘Dejó de estudiar y se tiro a la milonga’.

Ñ

Ñongo: Cualquier habitación (puede ser una casa abandonada, o un espacio construido con materiales reciclados) que es utilizada para introducirse sustancias psicotrópicas. Sinónimo: Picadero (aunque picadero hace referencia a las sustancias intravenosas, para lo cual es necesario una aguja).

P
Paisa (de paisano): Forma alternativa de decirle al inmigrante chino.

Perreado (de perro): Estar solo. ‘Míralo, está todo perreado’. No tener dinero. ‘Ando bien perreado’.

Perrón (de perro): Superlativo de bueno, bonito, agradable, ‘Está bien perrón el disco’.

Pin-yeks (derivado de Jacks o Jumping Jacks): Matatena, juego infantil para nenas, que consta de una pequeña pelota rebotadora de goma y asteriscos tridimensionales metálicos, de aproximadamente 2 centímetros.

Pirata: Extrovertido, que se encuentra fuera de los convencionalismos; loco. ‘Está bien pirata ese bato’.

Polliza: Reunión social en donde, el platillo principal es piezas de pollo freídas en una disca. Pollo a la disca.

Pulgas, Las (vocablo en desuso, derivado de 'flea market'): Mercado de baratijas, y cosas de segunda. El mercado de 'Pulgas' más conocido en Mexicali, se encontraba por la calzada Cetys en la colonia San Gabriel (donde hoy se ubica una subestación de la CFE). El término 'Tianguis', sustituyó a 'las pulgas', a comienzos de los 80, con la instalación del 'Mexicali Tianguis - Swap meet'. Por cierto, la palabra tianguis, resulta imprecisa e inadecuada; la voz argentina, mercadillo, es la indicada.

R
Ranfla: Vehículo automotor.

Raqueado (De origen incierto): Feo, desagradable; término en desuso. Sinónimo de sarraedo.

Reservoyo, Reservoi (De reservoir, reserva): Pozo que se cavaba en la tierra, a mediados del siglo pasado, para almacenar agua.

Reta (Derivado del verbo retar): Individuo o conjunto de individuos que están a la espera del resultado de un encuentro deportivo informal (de barrio, en la escuela. Aplica de igual forma en juegos interactivos de video), para enfrentar al ganador. Por lo general, el o los contrincantes lanzan el desafío cuando el juego deportivo aun no concluye: '¡Reta!; aunque también, es alguien del equipo ganador quien pregunta, '¿quién es la reta?'.

Riano (Derivado de río, a su vez de río Colorado): Uno de los primeros gentilicios (a principio de 1900) para los residentes del asentamiento humano, que después se convertiría en Mexicali.

Rifar: Que algo trasciende, que es superior a los demás. 'Chicali rifa'.

Rodino (Derivado de la ley de reforma y control de inmigración, promovida por los legisladores norteamericanos Simpson y Rodino, a finales de los 80): Forma alternativa para nombrar a los mexicalenses que tienen autorización legal para residir y trabajar en los Estados Unidos, específicamente, se usa para quienes laboran en los campos agrícolas del valle Imperial, pero tienen su residencia en Mexicali.


S
Sarra (Posiblemente derivado de zarrapastroso): Feo, desagradable. ‘Ese carro está bien sarra’.

Sincho (Derivado de Si) .- Usase como sustituto de Si (¿quieres una soda? Sincho). Denota certeza o seguridad de la ocurrencia de un evento (Sincho se fueron a comer)

Socio: Forma impersonal utilizada para iniciar y establecer contacto entre hombres: 'Hey, socio...'. Aplica también como saludo: '!Ese socio!'. En ocasiones, se usa como sinónimo de amigo o amistad. El posible origen puede ubicarse en la implementación del sistema de cooperativas escolares (iniciado durante el sexenio de Lázaro Cárdenas), en el cual cada alumno era un 'socio' con participación y derecho a un porcentaje de las ganancias, entre otras cosas, de la venta de alimentos.

T
Taka-Taka (Voz onomatopéyica): Grupo de música norteña integrado por lo menos, por un guitarrista-vocalista, bajista, y acordeonista.

Tango (Posiblemente derivado de town, downtown): Forma coloquial de referirse al Centro Histórico de Mexicali, y que antes era el centro de operaciones comerciales. También se le conoce como ‘El Pueblo’.

Taquizería: Forma en que se conocía a los primeros expendios de tacos de carne asada, hoy conocidos como taquerías.

Tecolín: Persona sin oficio formal, por lo general, adicto a la droga. ‘Aguas con el tecolín’.

Tierra: En eventos deportivos, grito con el que se le exige a otra persona que regrese a su asiento, porque estorba la visibilidad. ¡Tierra, compa!

Torre (de origen incierto): Dosis de la droga sintética conocida popularmente como cristal, cuyo costo en el mercado al menudeo, es de 50 pesos. Por extensión, otra forma de referirse a la cantidad de 50 pesos. ‘Cuesta un torre’.

Tramo: Pantalón. ‘Está suave tu tramo’.

Trinear (Derivado de train, training, entrenar): Preparar a alguien para que realice una labor. ‘Hay que trinearlo muy bien, para que no se vaya a equivocar’.

Tripear (de trip, viaje): Dar la vuelta, salir de paseo. ‘Vamos a tripear’.

Triki- triki (Derivado de la expresión en inglés ‘Treak or Treat’ o ‘Hagamos un trato o te haré un truco’): Expresión utilizada al momento de pedir dulces durante el festejo del ‘Dia de Brujas’, o ‘Halloween’, cada 31 de octubre.

W
Wini (Derivado de winner): Salchicha. ‘Quiero desayunar huevo con wini’.

AGRADECIMIENTOS:
Elsa Reyes, Antonio Rivera, Victor Medina Gorosave, Librada Martinez, Alberto Zamaniego, Carlos Alberto Gutierrez Aguilar, Yolanda Sanchez, Mauro Adel Quintero, Rodolfo Garcia, 'Diccionario Cachanilla', elaborado por el Taller de TV de la FCH de la UABC, Fernanda Acosta, Jonathan Lopez, Danitza Camacho, Zoar Alvarado, Eduardo Padilla, Kimberly Figueroa, Daniel Zuñiga.

lunes, 15 de noviembre de 2010

Por el reconocimiento y la aceptación de la lengua chicalense

Por Victor Martínez Ceniceros

'La etimología es tan importante que merece una veintena de estudios separados... revela un proceso de transformación de la cultura y la sensibilidad...'.
Marshall McLuhan, en 'Leyes de los medios'

'Compilar tonterías en orden alfabético no es hacer un diccionario.'
Gabriel Zaid

a) Condiciones locales
Si hablamos en términos geométricos, Mexicali es el punto de unión de dos rectas que forman un ángulo de 90 grados, que a su vez, generan otras intermedias (considerando para este ejercicio, fantasioso pero ilustrativo, la península y la línea divisoria entre los dos países, y no los 32 puntos cardinales disponibles).

El caprichoso cuello de botella que formó la naturaleza, una vez que la Baja California se transformó en península (tras desprenderse del resto de la masa continental), convirtió a este sitio, con el transcurrir del tiempo, en paso obligado para todo el que deseara dirigirse a California.

Sirvan ambos ejemplos (el símil matemático y el geológico) para demostrar la importancia de esta zona, como centro de (re) unión.

La simiente de los aborígenes, arribó a este lugar por el norte, procedente de Europa (que a su vez, venían de Asia, y antes de África), descendieron a través de la ladera del océano Pacifico, algunos se establecieron, pero otros continuaron el viaje tanto vertical como horizontalmente, quiero decir, bajaron hasta el cono sur (un proceso muy lento), o se expandieron de este a oeste (un hecho más realista y fácilmente demostrable).

Con el transcurrir del tiempo, fuera de los grupos autóctonos, casi nadie estableció su hogar en la zona que después sería conocida como Mexicali; solo, como ya fue mencionado, era un sitio obligado de paso para algunos norteamericanos, y uno que otro mexicano.

Ni siquiera los colonizadores españoles, que fundaron misiones en diversas partes de la península, pudieron echar raíces por acá (intentaron, pero no pudieron, no aguantaron), y compartir sus costumbres, su amor a Dios, su idioma, su codicia.

Digamos entonces que el castellano (o el idioma mexicano, compuesto del castellano y de algunos derivados del náhuatl), hizo su arribo con los primeros individuos que comenzaron a ver la posibilidad de éxito en este yermo, principalmente personas de estados vecinos, como Sonora (con toda la tradición de sus grupos aborígenes), y uno que otro connacional que subió desde la Baja Sur. Pero casi al mismo tiempo, los norteamericanos hicieron circular su idioma, lo cual explica la trascendencia que tuvo y tienen, las dos lenguas (o tres) en la conformación del habla mexicalense.

b) El origen de la lengua cachanilla
Hubo un momento en la historia evolutiva de la humanidad (una vez que el órgano bucofaríngeo, permitió la articulación de una variedad de sonidos), en que se tuvo la necesidad de comenzar a nombrar los objetos de alrededor –para incrementar ventajas, para reducir riesgos, había que expandir horizontes hasta ese entonces innombrados-, y los nuevos que surgían tras las invenciones, o mas interesante aun, a los sentimientos y emociones que se agolpaban.

Pero el proceso no se agota; una vez que se definen convenciones, el ser social las adapta, las hace propias, crea sus propias reglas. Cada comunidad posee una forma de lengua particular, resultado de la mezcla de culturas, de la experimentación, y hasta de la descomposición por ignorancia y fallas en el sistema auditivo, procesos de comunicación incompletos, por comodidad, o una cercanía semántica con la lengua materna.

Lo que convierte al caso Mexicali en uno muy especial, es que todas las condiciones antes citadas, se multiplican exponencialmente. La esperanza que despierta California, y los campos agrícolas del valle Imperial (California: la entidad más poderosa del país más poderoso, en el mundo occidental), ha generado la circulación constante de individuos en el último siglo, los cuales han aportado, directa e indirectamente, elementos para la conformación de la lengua y su respectiva habla particular, de esta zona.

Un ejemplo: Aunque en apariencia cerrado, quienes integran grupos de narcotraficantes, como nómadas forzados que son, llevan su cultura lingüística y depositan parte de ella en el lugar al que arriban, y luego el ciclo continua al tener que abandonar súbitamente su centro de residencia, llevándose, claro, las novedades adquiridas que luego depositarán en su nuevo centro de operaciones.

c) El diccionario
Denigrar o relacionar el habla local a subgrupos sociales (cholos, pandilleros, paisas, nacos, tecolines), o peor tantito, sentirse orgulloso de tal propiedad, divulgarlo como triunfo y colgarse la medalla, representa una manera cruel de relegarla. Y no es que el problema sea algún grupo marginado que merezca ser rescatado, sino que en el caso particular de Mexicali, la mayoría de sus habitantes utilizan localismos en sus alocuciones y mensajes diarios.

Hubo una época en esta comunidad, a mediados del siglo pasado, en que el inglés era un idioma de uso común (o por lo menos, algunas de sus palabras). Una niña, contenta por haber arribado a la ‘beis’ sin haber sido descubierta, en el juego de ‘Las Escondidas’, gritaba: ‘Uan, tu, tri por mi y por todos mis compañeros…’

Eso fue resultado natural de haber sido históricamente percibidos, considerados y tratados como una isla: Primero fueron los exploradores europeos quienes estimaron, con la tecnología disponible en aquellos tiempos, que la hoy Baja California, era un trozo de tierra en medio del agua. La otra, vino por añadidura, de parte de los gobernantes y residentes del resto del país: Demasiado lejos del D.F. para ser tomados en cuenta, y muy cerca de los Estados Unidos, para suplir nuestras carencias.

Ya en el caso concreto que aquí nos tiene, la observación etno y antropológica del
mexicalense, permite determinar en la actualidad, que la evolución y el cambio en el uso de nuevos términos, proviene del sector juvenil; además, aunque el uso es generalizado, como apuntamos líneas atrás, éste tiende a disminuir, principalmente por temor a ser relegado, o con el paso de los años, o bien, por la participación en otros subgrupos (laboral, estudiantil, religioso).

Más allá de la autopercepción, existe una realidad insoslayable: El habla mexicalense existe y es utilizada en más ocasiones de las que el propio residente local lo sabe o lo descubre.

Claro, hay que tener el suficiente valor civil (o la inocencia) para aseverar, por ejemplo, en una junta de trabajo para la presentación formal de un nuevo proyecto educativo, que el trabajo mostrado está bien ‘perrón’, a pesar de que casi la totalidad de los presentes, entiendan lo que queremos decir.

Es por todo lo anterior, que nos hemos aventurado a darle forma a un diccionario que sea la herramienta de apoyo, y al mismo tiempo, un elemento que coadyuve al reconocimiento de nuestra lengua.

Es importante destacar que para el diccionario, consideramos términos de uso común, y se excluyen aquellos propios de subgrupos especializados (jerga penitenciaria o pandillera, argot deportivo).

Otro punto a favor del trabajo de fortalecimiento de una lengua local, es que mexicanos al fin, tendemos (como parte de ese rasgo de naturaleza humana tan arraigado) a reconocer y admirar lenguajes coloquiales de otras culturas (slang, lunfardo), imitarlos o considerarlos como rasgo propio de nuestra personalidad ‘cool-ta’.

Para todo aquel individuo que a estas alturas del texto, siga alarmado, debo decir que el ‘Real Diccionario Chicalense’, incluye la recopilación de términos desde 1900 a la fecha, algunos ya en desuso, o de consumo limitado (clemar, raqueado, catiza), otros nuevos (chavala). En unos casos fue posible ubicar el momento y las condiciones en las cuales surgieron (chabela); otros tuvieron evoluciones sorprendentes (chuky), aunque otras palabras se usan comúnmente, pero no existe un significado aceptado por todos (chaka).

La condición principal de este diccionario, es que cada término es de uso exclusivo en esta zona, o que, en caso de tener aplicación en otro sitio (sobre todo en la frontera), en Mexicali tiene una acepción distinta.

Además, este diccionario nunca estará completo, es un trabajo de constante modificación porque todos hacemos el lenguaje, y este cambia todos los días.

Hagamos que la lengua chicalense rife y controle; no la escondamos, tampoco la neguemos.